El bitcoin (BTC) es la tendencia de estos días en la nueva generación de la economía mundial. Recientemente alcanzó la cotización de 40.000 dólares, aumentando en más del 60% de su precio mostrado en el mes de diciembre del 2020. 

El alto valor de esta moneda es porque los suministros son limitados. Tan solo existen 21 millones de bitcoins y no hay un ente gubernamental que controle o intente producir más de estas.

Nunca había cotizado tan alto, aunque a finales de 2017 se produjo una burbuja que le hizo llegar casi a los US$20.000, para luego perder un 45% de su valor en apenas seis días.

El interés en esta criptomoneda y su revalorización viene sobre todo de inversores institucionales, principalmente fondos de inversión, cuyos clientes están familiarizados con las monedas electrónicas y encuentran en el bitcoin una forma de diversificar el riesgo en sus carteras y proteger su patrimonio.

Una de las razones de este interés radica en que, con la crisis generada por la pandemia, los bancos centrales han intervenido en los mercados financieros mediante la implementación de tipos de interés cero o negativos, la compra de deuda soberana y la impresión de moneda.

El crecimiento de la criptografía en este 2021 es por la alta demanda generada por todo lo acontecido por la pandemia COVID-19. Muchos microempresarios se han visto envueltos en problemas financieros por el congelamiento de muchos negocios locales, quienes al ver reducido su flujo de clientes están perdiendo más dinero que el invertido.

Los especialistas aseguran que es probable que el esta moneda supere al oro en la medida que los millennials se conviertan en un componente más importante del mercado de inversiones, con el tiempo y dada su preferencia por el “oro digital” por sobre los lingotes tradicionales.

*Fuente: BBC, Forbes.