Uno de los métodos para ahorrar de manera sencilla pero efectiva, es el que propone Harv Eker en su libro Los Secretos de la Mente Millonaria.
- Harv Eker propone un sencillo sistema para repartir nuestros ingresos en porcentajes que responde al nombre de “Método Harv Eker”. Los porcentajes se asignan de la siguiente manera:
- 50% para necesidades básicas. Este porcentaje lo destinaríamos a gastos como la casa, salud, comida, transporte…
- 10% para ahorro. Es importante que el método que elijas te permita ahorrar una cantidad cómoda, contando con todos los posibles imprevistos. En este caso la cantidad ahorrada sería un 10%
- 10% para formación. Como decíamos, un gran diferencial de este método es la importancia que le da a la formación. Quizás solo por este motivo ya lo hace uno de los más completos desde nuestro punto de vista.
- 10% para inversiones a largo plazo. Este porcentaje es para que inviertan de cara al largo plazo, pero debemos tener en cuenta cuál es nuestro perfil de riesgo antes de elegir el producto.
- 10% para ocio. Seguramente este porcentaje sea el que más corto nos resulte, por lo que tenemos que seleccionar muy bien en qué gastarlo. Aquí incluiríamos todo lo relativo a diversión y ocio: restaurantes, conciertos, actividades…
- 10% para donativos. Además de promover la educación, este método incentiva la solidaridad. Harv Eker recomienda destinar un 10% en proyectos solidarios o donaciones con los proyectos de crowdfunding. Por ejemplo, los casos de Fondeadora.
Recuerda que no debes asignar 0% a las categorías AHORRO e INVERSIONES. Debes tener o una o la otra (si es posible, las dos). Si no empiezas a administrar con disciplina tus ingresos jamás vas a poder avanzar al siguiente paso.
Si tienes ingresos extra (además del ingreso fijo), o ingresos variables en el caso de tener un negocio, te recomendamos que tomes un ingreso mensual fijo como punto de referencia, y el excedente simplemente lo administres con otra plan, o lo cuentes como ahorro/inversión. Con este pequeño truco, en el caso de que aumenten repentinamente tus ingresos, o recibas “extra” (aguinaldo, regalo de la abuelita, etc.), te vas a contener de derrochar ese dinero y vas a mantener tus gastos constantes.