Cada vez son más los datos que indican un aumento en el acceso de las mujeres a servicios financieros, y el uso de los mismos por parte de las mujeres puede traer beneficios tanto económicos como sociales.

Es un hecho que las mujeres tenemos un promedio mayor de vida a la del hombre, por lo tanto nuestra vida productiva es mayor. Nuestra necesidades se extienden y se multiplican conforme tenemos hijos, y su vejez se extiende y requiere de recursos económicos por más tiempo que un hombre.

Un dato real es que el número de madres solteras o jefas de familia aumenta considerablemente año a año.

Para las mujeres de 30 años y más, la proporción de quienes han tenido al menos un hijo nacido es de 90.2%, lo cual nos indica que el ser madres es un hecho que forma parte de la gran mayoría de las mujeres en nuestro país. De éstas, el 38.0% tienen de uno a dos hijos e hijas, casi la mitad (47.1%) entre tres y cinco hijas e hijos; y 14.9% de ellas tienen seis o más.

Otro dato importante es que 4 de cada 10 mujeres de 25 a 49 años de edad, que formamos parte de hogares con hijas e hijos menores de 3 años de edad, desempeñamos una actividad económica en el mercado laboral (40.9%); mientras 7 de cada 10 mujeres cuando viven en hogares sin hijas o hijos (68.2%).

Las mujeres estamos participando en la economía familiar hasta con el 80% de los ingresos totales aún estando casadas. Este es un dato en verdad interesante.

Del total de las madres ocupadas en el mercado laboral, 64% son trabajadoras subordinadas y remuneradas; 26.6% trabajan por cuenta propia; 6.6% no tiene remuneración; y sólo 2.8% se desempeña como empleadora. Respecto al número de horas trabajadas; el 37.8% labora menos de 35 horas semanales (jornada parcial); a diferencia de las mujeres sin hijos en las que el 30.5% cubre una jornada laboral parcial.

Sí, las mujeres somos un pilar necesario y lo suficientemente sólido para sacar adelante nuestra familia. Sí ,es cierto que como mujeres tenemos una perspectiva muy diferente de las finanzas; y sí, es cierto que las mujeres aplicamos esas finanzas no sólo para los gastos variables sino para resolver todo lo referente a las necesidades básicas de nuestros hijos.

-Ana Ceci Fitz
*Fuente: INEGI, Gobierno de México, familias.com.