Hay muchas formas de ahorrar y quizá tú tengas un método de ahorro propio. Lo importante es que puedes hacerlo en el trabajo, en casa o incluso en el supermercado. El ahorro es parte de tu planeación financiera personal y la realidad es que no es tan complicado hacerlo, pero debes tener cuidado de no hacerlo de una manera incorrecta.

Por ejemplo, si crees que estás ahorrando por guardar lo que te sobra cada día, de una vez te decimos que no se trata de eso, sino de apartar un porcentaje fijo de tu ingreso de forma periódica para ocuparla como un fondo de emergencias o bien, para cumplir alguna meta. Se debe ahorrar de una manera formal para que el resultado sea exitoso.

Algunas opciones de ahorro formal son:

  • Contratar una cuenta bancaria. Al guardar tu dinero en el banco, éste se encuentra protegido por el Instituto de Protección al Ahorro Bancario (IPAB). Si el banco llegara a quebrar, tus ahorros estarán asegurados y no corres el riesgo de perderlos.
  • Cetes Directo. Es una opción de la Secretaría de Hacienda con la que puedes iniciar tu ahorro desde 100 pesos y al final obtener grandes rendimientos sin asumir algún riesgo. Te permite domiciliar la cantidad que quieres invertir periódicamente sin comisión alguna.
  • Si estás registrado en una Administradora de Fondos para el Retiro puedes realizar aportaciones voluntarias de acuerdo con tus posibilidades monetarias, y deducir de impuestos. Invertir a través de tu Afore puede generarte elevados rendimientos de forma segura.

Pero si deseas ahorrar un poco más puedes llevar a cabo las siguientes acciones:

  • Reducir la energía que consumes en casa al apagar los aparatos electrónicos que nadie está utilizando. Utiliza focos fluorescentes (estos consumen menos energía) y aprovecha la luz del día, de esta forma tu recibo no absorberá gran parte de tu ingreso.
  • Al cuidar el agua no sólo ayudas al planeta sino también a tu economía. Puedes utilizar un vaso de agua para lavarte los dientes o al abrir la regadera poner una cubeta y utilizar el agua recolectada para la lavadora o el excusado.
  • Si tienes auto puedes utilizarlo cada tercer día para no gastar tanto en gasolina. Compartir el auto con amigos que vayan en la misma dirección que tú puede ser una buena opción. También puedes utilizar la bicicleta.
  • Realizar un presupuesto te ayuda a tener más control en tus finanzas, identificar los gastos innecesarios y eliminarlos, así como saber cuánto dinero puedes destinar al ahorro y al pago de servicios necesarios como renta, comida, transporte o deudas.
  • ¡No adquieras deudas innecesarias! Si tienes tarjeta de crédito recuerda que su uso debe ser para emergencias y no olvides siempre pagar más del mínimo para liquidar lo más pronto tu deuda.
  • Si estás registrado en una Afore realiza aportaciones voluntarias. Pensar en tu retiro te dará estabilidad económica y mayor tranquilidad.